Ortodoncia
Ortodoncia ¿cuándo es el mejor momento?
Es muy importante tener una sonrisa impecable para nuestro bienestar personal y profesional, pero lamentablemente no todos nacemos con los dientes perfectamente posicionados, alineados y con un blanco radiante como las estrellas de cine. Gracias a estudios y a la tecnología que siempre se
está reinventando, ya existen tratamientos odontológicos que nos pueden dar una ayuda y mejorar tanto la apariencia y estética, como la salud bucal y el bienestar. La ortodoncia es uno de los tratamientos que con más frecuencia aplican los odontólogos y es uno de los procedimientos que más demandan sus clientes.
Existe una pregunta que suele surgir en casi todas las consultas al odontólogo: ¿cuándo es el mejor momento para un tratamiento de ortodoncia? ¿Es mejor cuando son niños, adolescentes o adultos? ¿Será muy tarde para los adultos el tratamiento de ortodoncia? Aunque no lo parezca, éstas son preguntas algo complejas para ser respondidas. Algunos odontólogos dicen que el mejor momento es cuando el paciente ya tiene sus dientes de hueso para aplicar el tratamiento y otros dicen que ya de adultos no hay nada que hacer al respecto.
Para poder extendernos en las explicaciones de estas dudas primero necesitamos tener bien claro qué es el tratamiento de ortodoncia, cuáles y en qué consisten cada uno de los tipos de ortodoncia y sus funciones, además de cuánto tiempo dura el tratamiento y cuáles son sus beneficios. Cuando ya tengamos una idea más clara de lo que es la ortodoncia, explicaremos cuál es la edad más aconsejable según los expertos y cuándo es aconsejable realizarse un tratamiento de ortodoncia y cuando no, por supuesto, si piensas que necesitas la ortodoncia lo mejor es que recibas un diagnóstico personalizado por un especialista ya que es quien podrá darte la más acertada recomendación según el caso.
¿De qué trata la ortodoncia?
En la odontología existe una especialidad llamada ortodoncia y es la que se encarga de estudiar, diagnosticar, prevenir y tratar las anomalías de posición, forma, relación y función de los dientes mediante el diagnóstico y corrección de posibles alteraciones por medio de diferentes tipos de fuerzas. En otras palabras, es el tratamiento que se aplican algunos pacientes para tener unos dientes bien alineados por medio del uso de unos aparatos que realizan la fuerza necesaria y exacta para colocar los dientes en su mejor posición.
La ortodoncia puede dividirse en dos tipos de tratamientos y se realizan según el tipo de fuerza que se requiera para corregir el problema. Pueden definirse de la siguiente manera:
- La aparatología fija: Son elementos fijados y adheridos en los dientes utilizando bandas y brackets, de los cuales se les ancla unos alambres metálicos que son finos y elásticos y estos se encargan de dar la energía necesaria para ordenar los dientes.
- Los aparatos removibles: Estos aparatos pueden ser removidos de la boca para realizar la higiene bucal o comer. Está compuesto por una delgada capa que se ajusta al paladar e incluye algunas piezas de metal que son las encargadas de mover los dientes y huesos mal posicionados.
Cabe destacar, que ambos tipos de aparatos tienen sus fines específicos y diferentes. Los aparatos removibles se recomiendan a pacientes que no poseen alteraciones o problemas dentales graves y usualmente se ponen en la dentición temporal para corregir y evitar un tratamiento más largo y
costoso en el futuro. En cambio, la efectividad de los aparatos fijos es mucho mayor, ya que están especialmente diseñados para la corrección de los dientes y ejercen una mayor fuerza en ellos.
El tratamiento no tiene una fecha estipulada de finalización. Como todo procedimiento médico, el tiempo de finalización depende de la reacción del cuerpo, la herencia genética del paciente, la eficiencia por parte del personal médico y la colaboración de la persona. Incluso, cuando el tratamiento finaliza y ya los dientes están en su correcta posición, se recomienda el uso de unos aparatos removibles ya que usualmente los dientes vuelven a su posición inicial cuando no tienen la tensión de los aparatos fijos. Sin embargo, estos nuevos aparatos son más fáciles de utilizar y más cómodos para el paciente. Por lo que solo queda esperar y mantener una constante revisión de la evolución de los dientes con un profesional.
Los beneficios de la ortodoncia son innumerables. Cuando se tiene un tratamiento perfectamente ejecutado y a tiempo, se conseguirá el alineamiento de la dentadura del paciente y gracias a esto, los dientes no se estropearán y se mantendrán saludables ya que la higiene bucal es más fácil y eficaz. Sin olvidar, que cuando se tienen los dientes bien puestos la sonrisa es más agradable, incluyendo la estética y simetría del rostro.
Ahora bien, ¿cuándo es aconsejable comenzar el tratamiento de ortodoncia? Algunos dicen que cuando les sale el primer diente, otros cuando se note la anomalía y algunos cuando ya sean adolescentes y se tengan todos los dientes de hueso. A continuación explicaremos cuál es el momento más oportuno para realizar el tratamiento y como lo hemos mencionado anteriormente, lo mejor es tener la opinión asertiva de un profesional en el campo para realizar el tratamiento más adecuado y lograr los resultados deseados.
¿A qué edad es más aconsejable?
Esta es una de las preguntas que más inquieta – sobre todo si se tienen hijos – y es muy difícil de contestar debido a su complejidad. Muchos se preguntan cuándo es la edad perfecta para la primera visita al odontólogo con su hijo o si por ser adulto ya no se está a tiempo de mejorar el aspecto de los dientes por medio del tratamiento de ortodoncia. Por lo general, muchos odontólogos recomiendan la primera visita a los 6-7 años o tan pronto se note una anomalía en la nueva dentadura del pequeño. Todo dependerá del grado de dificultad o problema que se presente y lo mejor es tratar el asunto con un buen equipo profesional odontológico.
Habitualmente, se recomienda visitar al odontólogo para chequear que el crecimiento de los dientes va bien y es el adecuado cuando comienzan a cambiar los dientes de leche por los de hueso y este proceso se desarrolla a los 6 o 7 años – todo depende de la genética del niño, no todos somos iguales –. El comienzo de los cambios de la dentadura de leche a los de hueso ocurre durante el periodo de la niñez y adolescencia, relativamente entre las edades de 6 a 13 años. En este periodo, es importante prestarle atención a los cambios y llevar un control de cómo van creciendo los dientes y los huesos de la cara del niño. Por supuesto, no todos tienen ese don ni son expertos en el tema. Así que lo mejor es consultar con un odontólogo de confianza.
La ortodoncia mediante la aparatología fija es recomendada para pacientes a partir de 13 años ya que usualmente el adolescente ya ha terminado el proceso de dentición. Cabe destacar que la ortodoncia no tiene un tope de edad, el paciente a partir de los 13 años puede aplicarse un tratamiento de ortodoncia siempre y cuando cumpla con todos los requisitos para poder obtener el tratamiento. Los pacientes que no han cambiado completamente sus dientes de leche por los de hueso, también pueden recibir tratamiento de ortodoncia pero mediante otros tipos de aparatos removibles y preventivos. Existen dentinas ortopédicas y pacificadores o chupones diseñados para no perjudicar el proceso de dentición del bebé, estos ayudan gradualmente a prevenir un futuro problema así como lo hacen los aparatos removibles.
Gracias a recientes investigaciones, podemos afirmar que no hay una edad fija para iniciar el tratamiento. Toda alineación y resolución de problemas dentales debe ser diagnosticado y tratado por un odontólogo profesional y especializado en ortodoncia y/o ortopedia maxilar quien es el indicado para aconsejar cuál es el tratamiento indicado además de cuándo y cómo hacerlo.
En resumen, la edad más recomendable para la aplicación de algún tratamiento dental es lo más pronto posible, así sea comprando dentinas y chupones ortopédicos, en la primera salida del diente o cuando los cambie de leche a huesos. Los tipos de ortodoncia son variados y cada uno cumple su función de acuerdo a las necesidades del paciente y de la gravedad del problema. Si bien nombramos que la mejor edad para la ortodoncia es desde los 13 años, a partir de los 6 años –cuando sus dientes de leche hayan geminado- es imprescindible una revisión odontológica para asegurarse que los dientes están preparados para su posterior cambio y si el niño necesita corregir o prevenir alguna deformación. La mejor recomendación es iniciar el tratamiento cuando el paciente esté completamente dispuesto a realizarse la ortodoncia, ya que es un proceso largo y con repetidas visitas al odontólogo, así que se necesita perseverancia y paciencia a lo largo del tratamiento.
¿Cuándo es necesaria?
Desafortunadamente aún existen anticuados odontólogos que recomiendan la primera visita al odontólogo cuando la persona tenga todos sus dientes de leche germinados e incluso han desilusionado a pacientes adultos que han querido realizarse un tratamiento de ortodoncia y se les negó la idea ya que, según ellos, es imposible mover los huesos y dientes del adulto. Como sabemos, cualquier persona puede iniciar la corrección de posición de sus dientes mediante la ortodoncia, lo único que cambia es el proceso y cómo es tratado el paciente por un especialista en ortodoncia.
La ortodoncia básicamente corrige la mala posición de los dientes y esta puede derivarse de diferentes tipos de problemas en la dentadura del paciente. Veamos cuáles son los problemas más comunes que requieren del tratamiento de ortodoncia y una breve explicación de ellas:
- Apiñamiento: Es una de las alteraciones dentales más frecuentes y consiste en la mala colocación de los dientes (pueden ser girados, amontonados o como su nombre lo dice: ‘apiñados’) debido a la falta de espacio en el hueso maxilar. El apiñamiento dental puede ocurrir en los dientes superiores o más comúnmente en los inferiores, complicando la higiene dental y aumentando el riesgo de enfermedades periodontales y grave desgaste en la dentadura.
- Línea media desplazada: Este problema es muy fácil de d
iagnosticar ya que es muy visible. Existe una línea vertical imaginaria que comienza desde la punta de la nariz hasta el mentón y divide la dentadura en partes iguales, la alteración se presenta cuando los dientes anteriores superiores e inferiores cruzan esta línea. - Espaciamiento: Este problema estético de tipo odontológico es define como separaciones, espacios negros o diastemas entre los dientes que ocurren como resultado de piezas faltantes o debido al pequeño tamaño de los dientes. Este tipo de problema puede aparecer por causas como herencia o por haber sufrido una periodontitis.
- Sobremordida y submordida: Estos casos se refieren cuando los dientes anteriores superiores cubren casi por completo los dientes opuestos, es decir, los dientes anteriores superiores se suben por encima a los inferiores y viceversa.
¿Cuándo no es indicado el tratamiento de ortodoncia?
A pesar que es un tratamiento completamente seguro y efectivo, existen algunos detalles a tener en cuenta cuando se inicia un tratamiento de ortodoncia. Algunas de las cosas a tener en cuenta son:
- Alergias al material, se debe a que los aparatos están hechos de acero inoxidable o níquel-titanio.
- Necesidad de una cirugía previa, algunas ocasiones es imperativa una cirugía previa ya que la ortodoncia alinea los dientes y los dientes están soportados en la estructura ósea, haciendo que el problema no sean los dientes sino el hueso como tal.
- Mujeres embarazadas, si no se ha comenzado el tratamiento y la mujer está embarazada lo mejor es posponer el tratamiento ya que se requerirán varias radiografías y éstas no son recomendadas cuando una mujer está en estado.
Cabe destacar nuevamente, que solo el odontólogo u ortodontista puede diagnosticar por medio de radiografías (probablemente una ortopantomografía y una telerradiografía), fotografías digitales, exámenes, interrogatorio médico y pruebas para obtener una información completa y detallada del estado bucal y óseo del paciente para saber si se tiene un problema de alineación o no y cómo tratarlo de la manera más indicada.
La ortodoncia es un tratamiento dental que ayuda al paciente a posicionar los dientes desalineados y que cada día se hace más y más accesible ya que muchos expertos están trabajando para mejorar el procedimiento y para ofrecerles a sus pacientes diferentes métodos y aparatos para el tratamiento.
Básicamente existen dos tipos de ortodoncia (la aparatología fija y removible) y ambas tienen sus propias funciones individuales que incluso, un paciente puede necesitar de las dos para la corrección de su problema. Estos aparatos son elegidos dependiendo de la gravedad y de cual sea exactamente el problema (como por ejemplo: apiñamiento, espaciamiento, línea media desplazada, sobremordida y submordida, mordida abierta o mordida cruzada, entre otros), además de la edad del paciente ya que esto influye en la flexibilidad de los dientes para ser posicionados.
Todo este riguroso y delicado trabajo es realizado por un ortodoncista ya que es el especialista en el ramo de la odontología. Los expertos de esta área de la odontología son quienes saben cuándo es el momento más óptimo para el inicio del tratamiento, cuál aparato es el correcto y quién sabrá llevar un control adecuado del movimiento de los dientes.
Nunca es tarde para iniciar el tratamiento de ortodoncia, por lo que podemos ver es capaz de corregir completamente muchos problemas dentales que a la larga puedan requerir de un tratamiento más complicado y doloroso.
También podemos ver que nunca es muy temprano para visitar al odontólogo si se comienzan a notar anomalías en el posicionamiento de los dientes en los niños, lo mejor es tener un diagnóstico temprano de un problema y así evitar futuros problemas. Inclusive, tampoco es muy tarde para arreglar una sonrisa. Muchos adultos se están animando a resolver complicaciones dentales y comenzar a sonreír con confianza, porque para la ortodoncia no hay límite de edad.

Dra. Casal Garre. Especialista en Ortodoncia Infantil![]()


